El estilo banda es un género musical surgido en el Estado de Sinaloa, en México, a principios de los años 20. Tiene muchos remanentes europeos al estilo de la Fanfarria europea, aunque como otros ensambles de viento típicos de México, también está caracterizado por una fuerte presencia de instrumentos de viento y un repertorio en el que también destacan las rancheras, corridos, polkas, valses, y mazurcas, todos ellos adaptados al estilo tradicional de la población de Sinaloa.
Durante los años 40, casi todos los pueblos de las sierras de Sinaloa tenían su propia banda de música. Una geografía de la zona bastante difícil entre el mar y la sierra que no permitía un acceso fácil al resto de la República ayudó a que varios ritmos de origen europeo se conservaran en estas poblaciones rurales.
Posteriormente el ritmo se internacionalizó a otros estados mexicanos y estadounidenses. Su época dorada fue durante los 90 con grandes sellos discográficos comercializando esta música. Otro de los motivos de su expansión fue el crecimiento de la población mexicana en los Estados Unidos, lo que llevó aparejado un mayor número de bandas ante la creciente aparición de festivales y recitales en la unión americana.
El característico sonido de una Banda sinaloense, parecido al de una banda de viento alemana y francesa, hizo que varios investigadores ubicaran su origen en esas regiones, especialmente al considerar que Mazatlán contaba a principios de siglo con una mayoría de habitantes europeos.
Etnomusicólogas como Helena Simonett argumentan que las primeras bandas de este estilo fueron creadas por gente que desertaba de las bandas militares y municipales y se iba a vivir a los pueblos aislados de las montañas, donde se retomaban las músicas populares.
Y es que en estos pueblos era un entretenimiento muy frecuente el ver a las bandas que amenizaban cualquier evento público y privado, en los que los músicos eran personas que generalmente tenían otra profesión pero se reunían para orquestar la banda.
Uno de los primeros difusores de la Banda sinaloense fue el Trovador del Campo Luis Pérez Meza, el cual aprovechaba su fama para organizar caravanas con las que recorría todo México acompañado por mariachis y Bandas mientras tocaban en público. Tras décadas de esfuerzo finalmente este cantante llevó una Banda a Norteamérica para tocar en Los Ángeles.
También destacaron en su tiempo Los Guamuchileños de Romeo Zazueta y la Banda El Recodo de Cruz Lizárraga. Dos bandas que eran muy conocidas a nivel regional desde hacía tiempo y que con la grabación de sus canciones dieron el gran salto a nivel nacional.
A partir de los 90, las figuras más individuales surgieron con fuerza. Aparecieron nuevos galanes y divas, que renovaron el género y le dieron un carácter más personalizado. Artistas de origen estadounidense como los hermanos Lupillo o Jenni Rivera crearon prácticas comunes en la industria discográfica del país. Otros grandes artistas de esta generación son Valentín Elizalde, Espinoza Paz o Julio Preciado. Hoy día este género es tan popular y lucrativo que artistas de distintos géneros han grabado con Banda, como por ejemplo Talía o Joan Sebástian.