La zarzuela es un estilo de música teatral o género musical escénico que apareció en España y se diferencia por tener partes instrumentales, partes vocales como solos dúos o coros y partes habladas, si bien existen excepciones en las que estas últimas partes, las habladas, no se encuentran.
El término zarzuela aplicado a este género musical y teatral proviene del Palacio de la Zarzuela, un palacio real español ubicado en las proximidades de Madrid en el que estaba el teatro donde se realizaron las primeras representaciones del género.
De manera equivocada se ha asimilado la zarzuela con la opereta, un género de origen francés, sobre todo por tener también partes habladas o declamadas, afirmando que la zarzuela es la opereta española. Realmente la zarzuela es más antigua y esa característica ya estaba en otros géneros europeos, también anteriores a la opereta. De hecho, en este sentido la zarzuela sería más bien el equivalente español del opéra-comique francés o del singspiel alemán. Estos dos géneros están caracterizados por producir representaciones teatrales y musicales en las que, al contrario que en la ópera, se alterna música con partes habladas. Por ejemplo, La flauta mágica de Mozart, no es una ópera sino un singspiel, con lo que tiene el mismo sentido decir que la zarzuela es la opereta española que el singspiel es la zarzuela vienesa.
La zarzuela se definiría más adecuadamente como un arte lírico y escénico propio de Hispania, pues aunque su origen estuviera en España, no tardó mucho en extenderse por casi todo el mundo hispánico.
Se acepta que los primeros autores que impulsaron este nuevo estilo de teatro musical fueron Lope de Vega y Calderón de la Barca. Como afirman algunas investigaciones, Calderón de la Barca fue el primer dramaturgo que empleó el término de zarzuela para una obra suya llamada El golfo de las sirenas, estrenada en 1657 y donde se interpretaba la vida de un joven aventurero que iniciaba un largo viaje lleno de misterios.
La zarzuela se expandió exitosamente en países como Cuba, donde destacaron compositores como Gonzalo Roig, Ernesto Lecuona, Rodrigo Prats y Eliseo Grenet. En Argentina, encontramos 3 teatros en su capital en los que se interpretaban obras como La verbena de la Paloma, o en Venezuela, con artistas como José Ángel Montero y Pedro Elías.
En Argentina, junto a la zarzuela, el sainete y el tango, formaron un género peculiar que tuvo bastante éxito, denominado sainete criollo.
A partir de 1950 la zarzuela sobrevivió en la cultura popular gracias a la discografía, un campo que ha estado creciendo desde entonces. Se realizaron una serie de grabaciones con bastante éxito, gran parte de ellas orquestadas por el español Ataúlfo Argenta, en colaboración con otros tan respetados como Mary Carmen Alvira o Julián Parera. Las mejores voces de la época se encontraban en estos discos, cantantes mundialmente famosos que de manera profesional se dedicaban a la ópera y a los recitales.
En la última etapa de los años 70 se vuelve a reavivar el interés por la zarzuela, especialmente por su música. Por toda Europa encontramos un renacer de la afición por los espectáculos líricos, principalmente entre la juventud.